Lactancia materna
Agarre correcto en Lactancia materna
Agarre correcto en Lactancia materna
Con motivo de la semana Mundial de la Lactancia Materna, en Dinámica fisioterapia hemos decidido publicar algo de información relacionada con este tema. Como sabéis, desde hace un tiempo somos Asesoras de Lactancia, por lo que esta semana es especial para nosotras.
La Semana Mundial de la Lactancia Materna fue instaurada por primera vez en 1992 por la OMS y UNICEF, como una forma de apoyar y visibilizar la lactancia materna. Desde entonces, cada vez más profesionales que trabajamos en este campo nos hemos unido a su celebración, realizando actividades, divulgando información, publicando fotos para dar mayor visibilidad, etc.
Hoy nuestra entrada, la queremos dedicar a una de las bases fundamentales de la lactancia: el agarre del bebé.
Agarre del bebé y complicaciones
El correcto agarre del bebé al pecho de su madre es esencial para que la lactancia materna sea exitosa y agradable.
El bebé nace con los reflejos necesarios para buscar el pecho de su madre y empezar a succionar, es algo instintivo para él.
Sin embargo, muchas veces hay interferencias externas que hacen que este agarre pueda verse dificultado y que derive en complicaciones, de las que hablaremos más adelante.
Algunas de estas interferencias son:
- Separar al bebé de la madre en las primeras horas de vida. 2 horas después del nacimiento, el bebé entra en un estado de letargo en el que estará más dormidito y será más difícil que se coja bien si no lo hizo antes. De hecho, la OMS recomienda empezar con la lactancia materna en la primera hora de vida del bebé.
- Uso de chupetes o biberones de forma temprana o como primera opción.
- Cesáreas: la causa es la separación para coser a la madre, no la propia cesárea en sí.
- Alteración de la succión por un parto instrumentado.
- Bebés prematuros: pueden tener debilidad para la succión.
- Presencia de frenillo o anquiloglosia de la lengua.
- Retronagtia del bebé (la mandíbula está hacia atrás).
Características de un agarre correcto
- Postura cómoda de la madre: debemos acercar el bebé al pecho y no al revés.
- Bebé con la boca bien abierta.
- Labios evertidos hacia fuera.
- La barbilla y la nariz del bebé tocan el pecho, sobre todo la barbilla.
- No debemos sujetar al bebé por su cabeza, mejor por la nuca.
- Debe coger el pezón y buena parte de la areola (zona más pigmentada alrededor del pezón).
- Cabeza en ligera extensión, para tener las vías aéreas más libres.
- Oreja, hombro y cadera en línea: no debe tener la cabeza rotada para alcanzar el pecho.
- Barriga con barriga.
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En este punto, queremos aclarar que puede ocurrir que el agarre de un bebé no cumpla al 100% todas estas características, pero si no da problemas de ningún tipo, no será necesario intervenir para modificarlo.
También queremos destacar que no debemos esperar al llanto para dar de comer al bebé, ya que en este caso estará más intranquilo y será más difícil que se agarre bien. El momento óptimo es cuando está en un estado de alerta tranquila, es decir, el bebé está despierto y empieza a dar señales de hambre. Si te interesa saber cuáles son estas señales, déjanoslo en comentarios y haremos una entrada hablando de esto.
Características de un agarre correcto
- Hoyuelos en las mejillas del bebé al succionar.
- Ruido al succionar.
- Dolor: siempre recalcamos esto y nunca nos cansaremos de repetirlo: LA LACTANCIA MATERNA NO DEBE DOLER. Si hay dolor es que algo no está bien y debemos intentar solucionarlo.
- Grietas en el pezón: suelen indicar que el bebé agarra de forma muy superficial, con lo que lastima el pezón.
- El bebé nunca se suelta solo de la toma: puede indicar que no está tomando suficiente leche y se queda insatisfecho.
Características de un agarre correcto
- Obstrucciones: por no vaciar bien el pecho.
- Reflejo de eyección exagerado por sobre-estimulación del pezón.
- Dolor.
- Grietas.
- El bebé coge poco peso.
- Irritabilidad del bebé por hambre.
La observación de la toma es algo esencial para las asesoras de lactancia y de las primeras cosas que hacemos antes de intervenir. Este agarre es muy importante para determinar si la lactancia se podrá mantener en el tiempo o si, por el contrario, se deja.
Por lo tanto, ante la duda, es mejor que acudas a alguien formado en este campo y que pueda ayudarte, puesto que muchas veces la solución es más fácil de lo que parece en un principio.
